Javier Martínez (Prosolia): “Deberían agilizarse la tramitación de permisos para almacenar energía”
El consejero delegado de una de las compañías líderes en apoyo a la descarbonización reclama una mejora de las conexiones con la red


Javier Martínez es desde 2017 consejero delegado de Prosolia Energy, una empresa alicantina de energía renovable que se ha convertido en referente europeo para acompañar a compañías industriales que quieren tener su propio sistema de autogeneración de electricidad. El directivo, que ha participado en el Foro CREO, organizado por CincoDías, ha defendido el papel que juegan los productores independientes de energías limpias y ha demandado menores trabas burocráticas para acceder a la red eléctrica y para poder almacenar energía.
La empresa alicantina Prosolia, nacida en 2003, es una de las más veteranas del sector de las energías renovables. En los últimos años se ha convertido en un importante aliado de grandes compañías y multinacionales como Stellantis, Atlantic Copper, Mercadona, Ford y Huf.
En el caso del grupo de automoción Stellantis, Prosolia ha construido, en su planta de Vigo (Citröen, Peugeot) el mayor parque de generación de energía fotovoltaica sobre cubierta de España destinado al autoconsumo. Con una potencia instalada de 18,3 MWp, permitirá obtener 22,7 GWh/año de electricidad descarbonizada, suministrando el 15% de la energía eléctrica consumida en el proceso de producción. En la planta de Figueruelas, el objetivo es llegar a cubrir el 80% de las necesidades energéticas. Prosolia también ha firmado acuerdos similares para poner placas solares en tiendas de Mercadona.
Para Javier Martínez, la capacidad de generación de energías renovables en España “ha quedado más que probada”, pero para que estas lleguen a desplegar toda su capacidad de atracción de capitales y de mejoría de la competitividad de la economía del país aún hay pasos por dar.
“Vemos importante que se mejoren la tramitación de los permisos para el acceso a la red, para conectar oferta con demanda de electricidad. Hay que simplificar los procesos administrativos”, apunta Martínez.
Lo mismo reclama para las solicitudes de almacenamiento de energía, una pata fundamental para poder sacar todo el partido de la producción de energía solar y eólica. “Vemos como las autorizaciones se retrasan entre un año y medio y dos años, a pesar de tener ya toda la instalación preparada”, subraya el directivo.
La energía solar y eólica tiene una capacidad de producción irregular: cuando hace sol (de día) o cuando hay viento suficiente. Por eso es fundamental poder acumular los excedentes de producción con sistemas de baterías.
El consejero delegado de Prosolia destaca como uno de los mayores valores de la compañía su flexibilidad, para poder apoyar a cualquier empresa o industria que quiere avanzar hacia la descarbonización. También han colaborado en el desarrollo de comunidades energéticas. La empresa ha desarrollado proyectos de energía solar en España, Portugal, Francia, Italia y Alemania.
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