La Fundación Princesa de Girona ha atendido consultas psicológicas de más de 2.000 jóvenes afectados por la dana

El Foro CREO de Cinco Días, organizado por Cinco Días y Prisa Media, no quiso pasar por alto las consecuencias de la dana del 29 de octubre pasado en la provincia de Valencia. En la segunda y última jornada de este evento, justo antes de la intervención del rey Felipe VI, los responsables de la Fundación Princesa de Girona explicaron cómo esta entidad se ha volcado en ayudar a los jóvenes de los pueblos afectados por la riada.

La Fundación Princesa de Girona surgió hace quince años con el objetivo de ayudar al desarrollo de la juventud y un respaldo para superar las barreras que los jóvenes encuentran. La presidencia de honor del patronato la ostenta Leonor de Borbón, Princesa de Asturias y de Girona.

“Nosotros, que trabajamos con los jóvenes, era lógico que fuéramos a cuidar a los jóvenes que habían sufrido la dana. La fundación no estaba preparada para intervenir en este tipo de sucesos. Si hacíamos algo, tenía que ser de nivel”, explicó Francisco Belil, presidente de la Fundación Princesa de Girona. “Tuvimos una reunión con sus majestades y el Rey de una forma sutil pero elegante dijo que se tenía que hacer algo”, añadió.

La fundación mandó a enviados para conocer las necesidades de la población y el patronato de esta institución aportó 50% más del presupuesto anual para poner en marcha las iniciativas.

“En casos de emergencia como este no podemos seguir los trámites de las Administraciones, porque demoran las respuestas”, destacó Belil, quien se quejó de la burocracia a la hora de ayudar a los afectados: “Deberíamos tener un mecanismo más ágil en beneficio de los afectados”, además de destacar que “España no está preparada para dar soluciones a estas crisis sociales.

En Valencia, la fundación ha puesto en marcha varios programas en 12 municipios en los que viven alrededor de 70.000 jóvenes. Uno de ellos es el apoyo a los centros educativos, en los que han desplegado una red de jóvenes docentes voluntarios en tareas como refuerzo educativo y actividades complementarias.

Vicente Cancio, patrono de la Fundación Princesa de Girona, puso el énfasis en un programa de ayuda psicológica. Los voluntarios en el terreno resaltaron los problemas de salud emocional de los jóvenes y los niños. “Me contaron cosas como que los niños escuchaban el ruido del lavavajillas y se ponían a llorar”, reveló Cancio. Por eso, la institución ha abierto tres centros de asistencia psicológica, donde han realizado 6.000 intervenciones y han atendido a 2.000 personas. “Ahora la gente se está abriendo”, apuntó el patrono de la fundación. “Estamos luchando para tener dos o tres centros más”, avanzó.

Igualmente, la entidad ha puesto en marcha un concurso de ideas para los jóvenes valencianos sobre emprendimiento, buscando soluciones que ayuden al territorio. De ahí, los expertos eligen 10 proyectos. “Al ver arrasada la estructura económica de esas ciudades, decidimos dar un apoyo al emprendimiento”, aseveró Belil.

Otra de las tareas en la que está trabajando la entidad es el mentoring vocacional con estudiantes. Cada centro educativo que participa recibe el apoyo de una empresa, quien se encarga de seleccionar a expertos que ayudan a desarrollar las ideas y vocaciones de los jóvenes.

El último de los programas de trabajo con jóvenes es mucho más cultural. Junto al productor y compositor Julio Reyes Copello, en colaboración con los artistas de AmplificARTE, los jóvenes están trabajando en la composición de una canción, una especie de himno que de voz a los niños, niñas y jóvenes que sufriendo la dana. Los responsables de la fundación incidieron en que una catástrofe como esta queda para siempre y por eso buscaron algo que también quede en la memoria de la comunidad a través de la música. “La música llega a los corazones de la gente”, destacó el presidente del patronato. “La música es un buen mecanismo para curar parte de esas heridas”, agregó.

En ese sentido, el organismo va a restaurar, rehabilitar un edificio, y convertirlo en un centro para jóvenes, de creatividad e innovación. “Es parte del legado que queremos dejar”, señaló Belil.

Esta institución en la que la princesa de Girona es presidenta de honor cuenta con más de 200 personas fijas trabajando voluntariamente sobre el terreno. “Estamos en un país muy solidario”, aseguró Belil, quien hizo hincapié en la generosidad de la gente y en casos de personas que han dejado su trabajo y acudido a Valencia para ayudar durante un año a través de esta organización.

Igualmente, los propios patronos de la fundación entendieron que tenían que hacer algo. “Las empresas más pequeñas querían hacerlo pero tenían más dificultades. Pero vieron que podían poner su parte y que su dinero iba a ser bien utilizado. Se nos han sumado muchas organizaciones e instituciones”, contó el presidente de esta institución ligada a la Casa Real.