Los cuatro mercados emergentes para reforzar las carteras de inversión con un dólar débil
Brasil, India o Emiratos Árabes Unidos son los países favoritos para los expertos. Las acciones y los bonos de los países en desarrollo presentan mayores perspectivas de rendimiento


Aunque en los últimos años no han brillado especialmente, lo cierto es que los mercados emergentes están superando ampliamente a los desarrollados desde comienzos de año. En dólares, la subida hasta mediados de mayo ha sido del 10,04%, frente al 1,8% que ha arañado el S&P 500.
¿Las razones? La primera, “un dólar estadounidense más débil, ya que ha cobrado fuerza la narrativa de una pérdida del excepcionalismo estadounidense [la creencia de que Estados Unidos representa un caso único en el escenario global]. Además, la presentación del modelo de lenguaje de DeepSeek ha demostrado de forma impresionante que China ha alcanzado a norteamérica en cuanto a capacidades de inteligencia artificial”, resume Michael Altintzoglou, gestor del Emerging Markets Fund de Flossbach von Storch. A eso añade que “los aranceles afectan principalmente a países con fuerte orientación exportadora, como Corea del Sur y Taiwán. Las economías impulsadas por la demanda interna, como India, se ven mucho menos afectadas”.
Ese contexto lleva a este experto a recordar que los inversores globales siguen estando infraponderados en acciones de países en desarrollo “y probablemente estos se verán obligados a aumentar su exposición” a medida que estos mercados sigan teniendo una valoración más atractiva en comparación con EE UU.
En opinión de Sammy Suzuki, responsable de Bolsa de mercados emergentes de AllianceBernstein, si persiste la caída de la principal divisa del mundo, podría favorecer la recuperación de estos países, ya que “un dólar más débil beneficia a los activos emergentes al atraer flujos de entrada, impulsar el crecimiento empresarial y económico, reducir los costes del servicio de la deuda de los bonos de estos mercados denominados en dólares y aumentar los precios de las materias primas, que son cruciales para muchas de estas economías”.
Avo Ora, cogestor del fondo Pictet - Emerging Markets, hace hincapié en que las valoraciones en la renta variable “parecen atractivas, con descuento del 30 % en precio y beneficios esperados respecto a mercados desarrollados”, pero la volatilidad puede persistir con la política arancelaria de EE UU y conviene identificar oportunidades. En su caso, sobreponderan México, Grecia y Brasil, además de Polonia, Argentina y Filipinas
10,04% Es la subida en dólares de las acciones de los mercados emergentes hasta el 16 de mayo. Esa rentabilidad supera significativamente al S&P 500, que solo ganó un 1,8% en el mismo periodo.
En cuanto a Luca Paolini, estratega jefe en Pictet AM, considera que “la brecha de crecimiento de las economías emergentes frente a las desarrolladas puede prolongarse este año y en 2026”. Además, “la única área clara de valor en deuda pública es la de mercados emergentes en moneda local. Las economías en desarrollo son las únicas del mundo donde la inflación sigue sorprendiendo a la baja y sus bancos centrales cuentan con mayor margen de relajación monetaria”.
En renta fija, Claudia Calich, responsable del equipo de deuda emergente en M&G Investments, asegura que los bonos soberanos en moneda local se encuentran entre los activos de mejor desempeño en lo que va del ejercicio, “impulsados por un dólar debilitado y rendimientos en caída, con un retorno total para el año hasta ahora del 7,78%”. De hecho, cree que este tipo de activo pueden seguir beneficiándose del entorno actual, especialmente cuando la Reserva Federal inicie su ciclo de recortes, que suele ser muy favorable para los rendimientos en moneda local. Y añade que “ahora podría ser un buen momento para que los inversores abandonen las carteras centradas en EE UU y busquen diversificarse en otras áreas del mercado. Creemos que la deuda de los mercados emergentes es un lugar atractivo para este tipo de flujos”.
Miguel Ángel Rico, director de Inversiones de Creand Asset Management en España, detalla que la diversificación mediante inversión en países en desarrollo “la estamos aplicando para aquellas carteras con un perfil de riesgo que tolera esta inversión, ya que suele tener algo más de riesgo. Para perfiles conservadores y horizontes de inversión más cortos, los fondos de deuda emergente pueden ofrecer una vía de acceso más defensiva pero aún con buen potencial”, resume.
Ahora puede ser un buen momento para diversificarse en otras áreas, creen en M&G Investments
Siddharth Dahiya, director de renta fija corporativa emergente en Aberdeen Investments, empieza a ver “un mayor interés de los inversores en esta clase de activos, que ofrece una alternativa atractiva a las compañías de gran capitalización estadounidenses”. En ese punto, resalta que el riesgo de impago es bajo. “Hay una serie de países con elevados niveles de deuda, pero debido al fuerte apoyo multilateral y a los calendarios de vencimientos reducidos, prevemos pocos eventos en los próximos 12 meses”. En el caso de las empresas, Dahiya menciona que JP Morgan sigue esperando una tasa baja de impago, “del 2,7% en 2025, frente a más del 5% en el caso del alto rendimiento estadounidense, debido a la solidez de los balances y a los niveles de apalancamiento relativamente bajos”.
Si buscamos oportunidades por países, la metodología aplicada por el equipo de mercados emergentes de Schroders, considera como lo más atractivos actualmente a los Emiratos Árabes Unidos, Taiwán, China y Brasil. Por el contrario, los mercados emergentes con peor puntuación son los países de la ASEAN (Brunéi, Camboya, Indonesia, Laos, Malasia, Myanmar, Filipinas, Singapur, Tailandia y Vietnam), Arabia Saudí y la India.
Sin embargo, para Santiago Rubio, director del área de estrategia de inversión de CaixaBank AM, India y Brasil se perfilan como regiones atractivas “debido a su crecimiento económico y potencial de consumo”.
China también ofrece oportunidades, “especialmente en el sector tecnológico y de consumo, aunque con riesgos asociados a las tensiones comerciales”. Y México e Indonesia son otros países que “podrían beneficiarse de la reconfiguración de las cadenas de suministro globales”.
Por sectores, Rubio menciona oportunidades a medio plazo en defensa, ciberseguridad, utilities, infraestructuras, y telecomunicaciones. “También se espera que otros áreas como energías limpias y renovables, así como fabricantes de vehículos eléctricos, tengan un buen desempeño”, apunta.
Dentro de los bonos soberanos en divisa local, Claudia Calich cree que menciona Brasil y Hungría, que “siguen pareciendo atractivos, ya que sus elevados rendimientos amortiguan la volatilidad. En el caso de Brasil, el impacto de los aranceles de Donald Trump también es limitado, dado su déficit comercial con Estados Unidos. En términos generales, América Latina y Europa ofrecen algunas de las inversiones más atractivas, mientras que Asia sigue siendo menos debido a los menores rendimientos y a la limitada posibilidad de que los bancos centrales recorten”.
En Amundi se muestran positivos con el gigante asiático a largo plazo pero con cautela en el corto
China vuelve al radar de los inversores pero con dudas
Los expertos no se ponen de acuerdo sobre China, la principal economía emergente. Por ejemplo, Alessia Berardi Berardi, directora de análisis macro y estrategia de mercados en desarrollo del Amundi Investment Institute, se muestra positiva a largo plazo y con algo más de reserva a corto “dada la extrema incertidumbre que suscitan los aranceles”. En cualquier caso, observa “un impulso positivo de los beneficios en el sector tecnológico, especialmente en lo que respecta al auge de las aplicaciones de IA y la tecnología de consumo. No obstante, mantenemos la cautela ante los riesgos de un creciente exceso de capacidad en China y el posible dumping o desplazamiento de los productos existentes en los mercados mundiales, lo que plantearía retos tanto para los actores nacionales como internacionales”.
De hecho, Christian Rouquerol, director general adjunto de Iberia y responsable de ventas en Iberia & Latam de Tikehau Capital, resalta que varias potencias emergentes están reorientando su atención hacia la reinversión de capital en el ámbito nacional. “Entre ellas se encuentran China y los países del Consejo de Cooperación del Golfo (CCG), que dependen cada vez más de los fondos soberanos para asignar capital a los gestores de activos. Estos gestores, a su vez, animan a las empresas de sus carteras a desarrollar sus actividades en los países de origen de los inversores. En consecuencia, el capital de estos países se alejará de los bonos del Estado occidentales, los bienes inmuebles y las participaciones minoritarias en empresas occidentales cotizadas”.
“No hay que olvidar que China es el país más representativo dentro de los mercados emergentes, y cuando estos lo empiezan a hacer bien, China entra en el radar. Sin embargo, pensamos que los inversores apostarán por el país sólo en el corto plazo, ya que China continúa con sus problemas estructurales y sigue muy endeudada”, señala Miguel Ángel Rico, director de inversiones de Creand Asset Management en España.
Por su parte, Álvaro Antón, responsable de Aberdeen Investments en Iberia, cree que la estrategia más apropiada es apostar por los emergentes excluyendo al país, “lo que puede mejorar los beneficios de la diversificación. El universo sin el gigante asiático ofrece algunas oportunidades de inversión únicas, especialmente en áreas como la tecnología de la información y los servicios financieros. En particular, mercados emergentes como India, Taiwán y Corea del Sur albergan empresas líderes que juegan un papel fundamental en la cadena de suministro tecnológica global”.
Cuestiones a tener en cuenta
Diversidad. Desde el equipo de mercados emergentes de Schroders creen importante señalar que el término “emergente” se refiere al mercado de valores y no al país. De hecho, “el conjunto de países con mercados emergentes es muy diverso y se encuentran en fases de desarrollo muy diferentes. Dentro de este grupo encontramos a países como Qatar, donde el PIB per cápita es superior al de EE UU, pero también a la India, donde el PIB per cápita es inferior a una trigésima parte del estadounidense”. En parte como resultado de esta diversidad, la dispersión de las rentabilidades de los países y las acciones ha sido persistentemente amplia y mayor que en los mercados desarrollados. “Esto crea potencialmente oportunidades para que los gestores activos generen rentabilidades superiores a la media del mercado”, añade.
Impacto. En SpainNAB, el Consejo Asesor español para la Inversión de Impacto, ven especialmente atractivos los mercados emergentes por su alto potencial de transformación y la urgencia de abordar sus retos sociales y medioambientales. “Sin la participación activa de inversores, que faciliten los fondos necesarios, no será posible alcanzar los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS)”, destaca su directora general, Mercedes Valcárcel, quien recuerda que la inversión de impacto desempeña un papel clave en el crecimiento económico y la reducción de la desigualdad “al canalizar capital hacia proyectos que generan beneficios sociales y ambientales junto con retornos financieros”.
Tipos de interés. Para Mali Chivakul, economista de países en desarrollo en J. Safra Sarasin Sustainable AM, una mayor relajación monetaria en muchos mercados emergentes debería respaldar los tipos nacionales. En ese sentido, mantienen su previsión de “nuevos recortes en México, India y Tailandia. También esperamos que el Banco de Corea continúe flexibilizando su política monetaria”. En América Latina prevén una última subida de tipos en Brasil, hasta alcanzar el 15%, mientras que en Colombia se mantendrán en pausa.